Los Campeonatos del Mundo de Natación 2025, celebrados en Singapur del 11 de julio al 3 de agosto, marcaron un hito en sostenibilidad dentro del deporte mundial. Como primera ciudad del Sudeste Asiático en albergar esta prestigiosa competición, Singapur ofreció un espectáculo deportivo de alto nivel en seis disciplinas acuáticas, al mismo tiempo que estableció un modelo para eventos masivos respetuosos con el medio ambiente.
El núcleo de esta estrategia fue la iniciativa “Trash to Treasure”. Se recolectaron aproximadamente 100 000 latas de aluminio mediante la School Recycling League, que involucró a cinco centros preescolares PCF Sparkletots, ocho escuelas primarias y tres secundarias. Las latas fueron recicladas en circuito abierto y transformadas en unas 5 000 medallas para atletas élite y Masters — siendo la primera vez que las medallas proceden de aluminio reciclado en estos campeonatos.
Singapur colaboró con la fintech ecológica MVGX como socio oficial de soluciones sostenibles. MVGX implementó herramientas digitales avanzadas para monitorizar y gestionar las emisiones de carbono del evento, incluyendo transporte, consumo energético y gestión de residuos. Entre las acciones se incluyó el seguimiento en tiempo real de emisiones, un diario de carbono en la aplicación oficial para implicar al público, campañas educativas para proveedores y patrocinadores, y un informe transparente con compensación de las emisiones inevitables.
Estas iniciativas convirtieron a Singapur 2025 en un laboratorio en vivo de planificación sostenible para eventos deportivos, generando prácticas que podrán ser adoptadas en competiciones globales futuras. Como explicó Gabriel Wong de MVGX, el objetivo era demostrar que la responsabilidad ambiental puede potenciar un evento deportivo de élite.
Más allá de las hazañas deportivas, Singapur 2025 estableció un nuevo referente al integrar la sostenibilidad en todos los niveles del evento. Desde convertir residuos en medallas hasta gestionar emisiones en tiempo real, esta edición destacó como un ejemplo de organización climáticamente responsable.