Siguiendo el compromiso para eliminar la mayor cantidad de emisiones de carbono posibles, la aerolínea Air Nostrum confirmó por medio de un comunicado oficial que será una de las primeras (junto a Ravn Alaska y Icelandair) en contar con aviones propulsados por hidrógeno tras agregar a su flota al regional turbohélice Dash-8.
El acuerdo de Air Nostrum se pactó con Universal Hydrogen para surtir la flota de aviones europeos en el presente y de cara al futuro del transporte aéreo, el cual lleva un camino que apunta hacia la movilidad verde.
Para introducir la tecnología del H2 en los aviones actuales, la aerolínea compraría 11 kits de conversión para turbohélice, los cuales contienen una pila de combustible de hidrógeno y un motor totalmente electrificado para reemplazar las unidades de potencia que actualmente están equipadas.
Una ventaja de contar con los kits distribuidos por Universal Hydrogen es la no dependencia de una infraestructura para surtir el hidrógeno en las aeronaves, de hecho, esta ha sido una de las características principales para que las dos compañías estrecharan un lazo de trabajo a largo plazo en pro de la movilidad «verde».
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Air Nostrum y el hidrógeno como futuro de la aviación
Con respecto a la transición total hacia el hidrógeno, Air Nostrum confirmó que tiene toda la confianza y seguridad en que el uso de esta tecnología se establecerá como un factor predeterminado para el desarrollo de la movilidad aérea, aunque la conversión total a una configuración cero emisiones entrará en vigencia una vez se evalúen temas como: diseño, rendimiento, operatividad y seguridad.
Para ver estos aviones operando en vuelos comerciales habrá que esperar hasta el año 2025, cuando Universal Hydrogen y Air Nostrum tienen previsto recibir hasta 60 pasajeros por viaje en ruta que pueden abarcar hasta los 1.000 kilómetros y para ello se preparan desde ya afinan detalles técnicos y administrativos.
Redacción | Ronald Ortega
